El verano es una de las épocas que más nos gustan, pero también causa un gran impacto en la salud de nuestra piel. El calor, la radiación y las exposiciones solares prolongadas aceleran el envejecimiento cutáneo. ¿La consecuencia? Arrugas más marcadas, aparición de manchas, pérdida de luminosidad… ¿Te suena? Por eso, cuando las vacaciones terminan, además de revisar nuestros lunares, es el momento de recuperar la belleza natural de nuestra piel. Por eso, aquí te contamos cuáles son los tratamientos faciales de medicina estética más indicados tras el verano.
Tratamiento láser de manchas
Existen diferentes tipos de manchas y saber diagnosticarlas correctamente es fundamental para poder tratarlas. De ahí, que el primer paso y el más importante sea acudir al dermatólogo. Un estudio detallado de las manchas determinará si se trata de una lesión benigna o maligna.
Tras el verano y con la edad es frecuente que aparezcan diferentes tipos de manchas como el melasma, las efélides y los léntigos solares. ¿Se pueden eliminar? Sí y existen diferentes opciones. Por ejemplo, cuando se trata de manchas de tipo hormonal, las terapias tópicas despigmentantes son la mejor opción. Pero si hablamos de léntigos solares, el tratamiento más adecuado es el láser.
Peeling facial
Es una técnica no invasiva cuyo objetivo es el rejuvenecimiento de la piel para mejorar su textura y luminosidad, aclarar las manchas, mejorar las arrugas superficiales o tratar problemas de acné como las cicatrices.
El peeling químico consiste en la aplicación tópica de distintas sustancias en la piel, para conseguir una renovación de la misma y eliminación de las capas superficiales de células muertas.
Los peelings se pueden clasificar, en función de su grado de penetración en la piel, en superficiales, medios y profundos. Los peelings superficiales se emplean para eliminación de las capas más superficiales de la piel que contienen células muertas. Sirve para dar un aspecto de piel limpia y saludable, mejorando imperfecciones y aportando luminosidad a la piel. Los peelings medios y profundos utilizan sustancias que penetran en mayor profundidad y por lo tanto provocan una irritación de la piel que se manifiesta como enrojecimiento y exfoliación de la piel. Son idóneos para tratamiento de procesos donde necesitamos que el peeling alcance las capas superiores de la dermis, como es el caso de manchas, arrugas, o cicatrices de acné.
Recuperar la hidratación con ácido hialurónico
El ácido hialurónico es una sustancia de origen natural, presente en la matriz que soporta a las células de nuestro organismo.Permite el relleno de arrugas permanentes y la reposición de volúmenes perdidos por el descolgamiento facial. Corrige las ojeras, surcos nasogenianos, perfilado de labios, aumento de volumen de labios, etc. Lo ideal es su combinación con otros tratamientos.
Presenta la capacidad de captar y retener grandes cantidades de agua, por lo que se emplea en numerosos productos cosméticos por su gran poder hidratante. A su vez estimula la síntesis de colágeno, lo que multiplica y prolonga el resultado rejuvenecedor.
Microneedle, combatir arrugas y manchas
La técnica del rodillo, a base de microagujas (microneedling), se perfila como una de las soluciones dermatológicas más eficaces para hacer penetrar activos a un nivel profundo, y todo a través de un procedimiento mínimamente invasivo. Más allá de combatir arrugas y cicatrices, mejora el melasma o el vitíligo.
Se trata de un rodillo con múltiples agujas pequeñas que al rodar por la piel hace penetrar diversas sustancias en las capas más profundas, abriendo microcanales.
- Combaten el envejecimiento cutáneo, las cicatrices de quemaduras y de acné, las arrugas y las estrías.
- Favorecen la penetración de activos cosméticos, tales como la Vitamina C, el Retinol o el Ácido Hialurónico. Permiten que penetren tanto las moléculas demasiado pequeñas para otros métodos, como las grandes.
- Espesan la epidermis.
- Entre sus recientes aplicaciones están las de mejorar significativamente el melasma y el vitíligo.
Tratamiento de arrugas y líneas de expresión
Antes de comenzar debemos tener clara la diferencia entre las arrugas y las líneas de expresión. Las arrugas se producen como consecuencia del envejecimiento y flacidez de la piel. Con el de los años, la regeneración natural de la piel se vuelve más lenta disminuyendo la formación de colágeno y elastina, perdiéndose así la firmeza de la piel. En cambio, las líneas de expresión son surcos que aparecen al realizar un movimiento repetitivo de gesticulación. Al realizar este movimiento constante con los músculos del rostro, la piel se marca formando una hendidura profunda, que incluso deja su huella aun dejando de gesticular.
Las arrugas aparecen habitualmente en las zonas de expresión, como, por ejemplo, el entrecejo, el contorno de los labios, la comisura de los labios y en el mentón. Si, existen varios tratamientos punteros actualmente que ayudan de manera muy eficaz a eliminar las arrugas y las líneas de expresión, aunque dichos tratamientos quedan reservados a los centros de estética ya que deben ser realizados por médicos profesionales.
Si quieres saber más sobre los tratamientos faciales más indicados tras el verano, no dudes en consultar a nuestro equipo. ¡Te esperamos!